Si alguna vez has acudido a una clínica de fertilidad o te has puesto a investigar sobre tu fertilidad, seguramente has escuchado este término “reserva ovárica”, el cual se refiere a la cantidad de óvulos que la mujer tiene en los ovarios en una edad y tiempo determinado.

Ahora que ya sabes del término, conozcamos un poco más sobre su importancia para el embarazo y los factores que influyen.

Importancia en la fertilidad

Cuando una mujer o una pareja deciden traer un bebé al mundo, empiezan a considerar todos los factores a su alrededor, entre ellos la edad en la que han tomado esta decisión. ¿Por qué es importante? En la mujer, después de los 35 años, la reserva ovárica no es la misma que en años anteriores, ya que la fertilidad disminuye con los años.

Debido a esto, puede afectar en quedar embarazada tanto de forma natural como con tratamientos de fertilidad. También existen casos donde, aunque sean jóvenes, sufren de reserva ovárica disminuida, que es la poca respuesta a la maduración de óvulos.

Medición

Aquí llegamos a un punto interesante, los procedimientos que un especialista te puede realizar para conocer tu reserva ovárica son:

• Ecografía transvaginal: esta se realiza durante los primeros días de tu periodo, donde se hace un recuento de folículos antrales, entre más tengas, más grande es tu reserva ovárica.
• A través de hormonas, una de ellas es la Hormona antimülleriana, por medio de un examen de sangre en cualquier día del ciclo menstrual, se revisa si hay altos niveles de esta hormona, lo que es una señal para determinar que se tiene una buena reserva.
• Otras opciones hormonales son FSH, LH y estradiol, que ayudan a estimular la producción de óvulos.

¿Puedo embarazarme si mi reserva es baja?

Lo principal para conocer si tienes una baja reserva o eres mayor de 35 años, es que acudas con un profesional de fertilidad para conocer las opciones adecuadas a tu caso. Algunas de las recomendaciones si tienes reserva ovárica baja es intentar el embarazo lo más pronto posible ya sea por fecundación in vitro o inseminación artificial, así como también considerar la opción de preservar la fertilidad, un proceso de guardar o proteger óvulos o espermatozoides para que la persona pueda utilizarlos para tener hijos biológicos en el futuro.

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